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El Chorro de Quevedo es más que un lugar en Bogotá; es donde comenzó la historia de nuestra ciudad. Entender sus leyendas y el pasado de nuestra gente nos conecta con nuestras raÃces y nos ayuda a saber quiénes somos. Aprender sobre nuestro origen no solo nos enriquece, sino que nos da fuerza para crear un futuro mejor.
Chibchacum, dios muisca de la lluvia y los terremotos, creó el chorro al golpear el suelo con su bastón, proporcionando agua a la aldea. Los muiscas, agradecidos, construyeron un altar en su honor y ofrecÃan flores y frutos para agradecer su bondad. Pasados los años esto se convirtió en lo que es hoy el chorro de Quevedo, lugar el cual se basa la historia teniendo de referente la leyenda.
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